La terapia por andulación está basada en los beneficiosos efectos combinados de las vibraciones oscilantes y de la administración de calor sobre el cuerpo. Estos efectos se vienen estudiando desde hace más de 50 años, por lo que hoy en día este procedimiento terapéutico está completamente asentado en el campo de la fisioterapia, la rehabilitación y la medicina deportiva.
Con el trabajo de investigación realizado en este campo durante décadas se ha conseguido encontrar las frecuencias e intensidades necesarias para tratar de forma específica un gran número de patologías. Así pues, la aplicación de un determinado espectro de vibraciones, único por cada patología y paciente, permite tratar dolencias tan distintas como la fibromialgia, la artrosis, las hernias discales o la osteoporosis.
Esta capacidad de acomodarse a pacientes de todas las edades, con cuadros médicos y situaciones personales distintas, es uno de los puntos fuertes del tratamiento con vibraciones andulantes. Un claro ejemplo de esta flexibilidad es el hecho de que tanto la utilizan deportistas de primer nivel como personas mayores que padecen cuadros dolorosos, como podría ser la artritis.
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